la intuición de un movimiento en el horizonte.
un astro viene hacia la tierra rápidisimo
y vamos a morir todas: como los dinosaurios.
¿de qué hablan las plantas?
el viento murmulla en griego antiguo
y me conecto con miedo a ese idioma
y siento una tristeza tranquila y de civilización pasada.
una tristeza arcaica como las piedras.
una tristeza, digamos, de cuencos de arcilla y de cerámica.
Es inútil pretender vivir como individuos
cuando todos nuestros movimientos
están empapados de raza humana.
Pertenecemos a una red enorme, húmeda y finita.
Me entrego, pues, al horror vacui, a los globos
y al frío áspero de los fluorescentes.