Mi disfraz de mujer es el apéndice de un ecosistema enorme,
pues he sido fabricada para rendir culto a mis muertos.
Estas manos han de saber amasar pan
y acariciar un vientre.
Estas manos han de saber quebrantar fémures
y separar pétalos.
Estas manos han de saber diseccionar hormigas,
levantar ladrillos y liarse un porro.
Todo el mundo se merece un culo caliente que llevarse a la boca.
Tengo mucha prisa,
pues estas tetas hiperbólicas han sido diseñadas para dar de mamar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario